martes, 15 de diciembre de 2020

NARVAJA, Roque: Cuando pasa la tormenta

de "Chimango" (1974)


El viento se lleva las nubes,
el cielo aparece en los ojos
y surgen gigantes sin destino
que emigran, al fin, a un lugar distante
donde mueren lentamente,
se van como suspiros en el aire.

Aliento de vientos benignos
susurran palabras de calma.
Tu cara es más cara, cara al sol,
y siento que ya -¡uy!-, que ya te quiero
como no quise nunca,
son nuestras las memorias en el tiempo...

(1951)



BAGLIETTO, Juan Carlos: Mirta, de regreso



De regreso, Mirta,
ya sabes: tres años a la sombra.
No quiero saber si me fuiste fiel.
Yo sé que una mujer valiente se inclina igual
para el lado de la sed.

Servime algo, Mirta,
parece mentira el verte como antes.
Pero para el que vuelve del infierno
ya no hay más fantasías.
solo quiere un tiempo blando,
pero esto, Mirta, nunca lo sabrás.

No es necesario que estés alegre
ni que prendas la luz.
Entré despacio sin que me vea nadie.
La noche se abre como un abrigo, Mirta.
Y es un sábado más, como dice el tango.
Mirta, contame cómo andás.

Hacé de cuenta que estuve navegando:
es casi lo mismo, solo cambia el paisaje.
Abajo el mar que nunca se ve,
arriba el cielo, el cielo raso,
y tu foto en la pared.

La moda ha cambiado un poco, Mirta.
Ya no hay ni un pelo largo,
todos parecen soldados.
Me siento parado en un cementerio,
me recibió el frío y un nuevo gobierno...
Mirta, no recuerdo ni tu cuerpo.

Y ahora me voy, Mirta,
para vos soy un extraño conocido.
Si no estoy llorando, ¿no ves cómo me la aguanto?
Debajo de la cama asoman sus zapatos...
Mirta, gracias por todo.

Salgo a la verja, parece que ha llovido.
En la estación retumba el Estrella del Norte.
"Vení a verme cuando salgas -me dijo el Turco-.
Comés todos los días y no hay problemas de laburo.
Solo algunas noches salís a trabajar".

(1956)



lunes, 14 de diciembre de 2020

GIECO, León: Canción de amor para Francisca


de "León Gieco - 4º LP" (1978)

En una casa del barrio San Pedro
Francisca muestra todo su cuerpo.
Ponen dinero entre sus senos, toman vino negro
y algunas ginebras.
Viste de verde, viste de rosa
y se desviste muy silenciosa.

Los lunes que no trabaja Francisca,
con una canastita con flores y su hijita
van a correr por el monte,
los caminos y los campos,
ella dice que los besos,
los gorriones y las flores
los lunes tienen mas perfume.

En una habitación del fondo de la casa
los hombres pasan, los hombres pasan.
Nadie le ofrece algún trabajo
porque tienen miedo de quedarse sin ella.
Piel de canela, ojos de pasto,
cabellos largos y aliento a trigal.

Los lunes que no trabaja Francisca,
con una canastita con flores y su hijita
van a correr por el monte,
los caminos y los campos,
ella dice que los besos,
los gorriones y las flores
los lunes tienen mas perfume.

(Cañada Rosquín, Santa Fe, 1951)