jueves, 26 de enero de 2017

SPINETTA, Luis Alberto: Caminata


Tema inédito

Dicen que esta calle existe
y a pesar de que camino
no la encuentro...

Hoy mis pasos parecen ser más lentos
o es que todo va ligero...
más ligero...

Alguien me mira y otros pasan detrás,
voy a buscar al hombre que me mire hasta el fin
y por eso sigo yendo..

Dicen que esta ciudad no duerme
porque el sueño la hace lenta...
Dicen que esta ciudad tampoco vuela
porque el vuelo no es la tierra...

Ah, si supieran que yo vengo a buscar
a quien descienda desde sí para volver a empezar,
a quien duelen las raíces del planeta.

Miraré en mis pasos la selva astral.




miércoles, 11 de enero de 2017

PASTORAL: Lustrabotas de avenida



Lustrador de las miserias ambulantes,
sé que todos usan guantes para estrechar tu mano,
sucia desde el antebrazo hasta todos tus dedos,
que aunque sean diez, impotentes son,
que aunque sean diez, tus manos son dos.

Luchador de la ironía cotidiana,
entre tus manos mugrientas oprimes tu arma de cerda
como todas las mañanas, en la calle o en el bar,
te llaman a vos sin saber quién sos.

Alumno sin maestro,
¿quién te dio a luz a oscuras?

Si pensamos que tu vida es ignorante,
entre frascos de tintura, entre pobres y avenidas
tienes tu epitafio listo y un diez de graduado
en la vida lustrando al sol.

¡Cuánto te amé, pequeño!
¡Cuánto lloré tu muerte entre diarios y franelas!



Alejandro De Michele: voz y guitarra
Miguel Angel Erausquin: guitarra y voz




GIECO, LEÓN: Hombres de hierro


de "León Gieco" (1973)

Larga, muchacho, tu voz joven
como larga la luz el sol,
que aunque tenga que estrellarse
contra un paredón,
que aunque tenga que estrellarse
se dividirá en dos. 

Suelta, muchacho, tus pensamientos
como anda suelto el viento,
sos la esperanza y la voz que vendrá
a florecer en la nueva tierra. 

Hombres de hierro, que no escuchan la voz,
hombres de hierro, que no escuchan el grito.
hombres de hierro, que no escuchan el llanto:
gente que avanza se puede matar
pero los pensamientos quedarán. 

Puntas agudas ensucian el cielo
como la sangre en la tierra,
dile a esos hombres que traten de usar
a cambio de las armas, su cabeza. 

Hombres de hierro, que no escuchan la voz,
hombres de hierro, que no escuchan el grito.
hombres de hierro, que no escuchan el llanto:
gente que avanza se puede matar
pero los pensamientos quedarán. 

León Gieco
(Argentina, 1950)



Versión en vivo, en el recita (BAROCK III) 1973